POLITICOS LERDOS

He leido que han cambiado el nombre de un Colegio. Le han puesto La Rosa de los Vientos, eliminado el que tenía de Juan XXIII. Desde luego el hecho de ser político, de tener un cargo en un centro educativo o en un Ampa, no implica que se tenga muchas luces.

Juan XXIII, es reconocido como un personaje bueno que influyo enormemente en su tiempo, independientemente de ser Papa. Su encíclica Pacem in Terris fue considerada como un texto muy importante incluso por los paises del Telón de Acero. Un hombre bueno que en los peores tiempos de la Guerra Fría dio esperanza y caminos a la paz.

Creo que es muy importante mantener recuerdo de estos grandes personajes tan determinantes en la historia del mundo, sobre todo en los Centros Educativos. Al igual que me parecería bueno el nombre de Carlo Marx, al que ya los jóvenes, incluso los que estudían en la universidad, en su mayoría lo desconocen.

Si de los centros educativos quitamos nombres importantes de la historia, demostramos lo que pasa dentro, cada día menos horas de historía, de filosofía, etc. de todo lo ques pensamiento, una enseñanza no centrada en colaborar a desarollar personas sino a crear ciudadanos de moldes para la sociedad consumista en que vivimos. Por ello, son politicamente correctos, colegios con nombres vacios, como lo de Rosa de los Vientos y otras genialidades, para que nadie pregunten que quien era ese personaje.

Lo peor es que esas mentes preclaras luego se definen de progresistas o de izquierdas, aunque no hayan leido nada de Marx, ya no de Karl sino incluso de Groucho -que era más divertido-, pues más haya de leer El País los domingos no llegan, y algunos sólo para leer las paginas deportivas.

Como dijo El Guerra (Alfonso no, el otro, el bueno) "Hay gente pa to".

A mi como que la historía y sus personajes cada día me gusta más, se aprende lo que hay de bueno y de malo. El pueblo que no conoce su historia, no sabe de donde viene, no sabra a donde va y tendrá el peligro de volver a caer en los mismos errores.

RAMON SANCHEZ HEREDIA